Bolivia registra un promedio de 127 denuncias diarias por violencia en el marco de la Ley 348
Las estadísticas revelan que la violencia familiar y doméstica representa más del 70% de los casos, seguida por los delitos de violencia sexual, con la mayor concentración en los departamentos del Eje
Imagen generada con IA.
MARIELA COSSÍO M.
En Bolivia, cada día se registran en promedio 127 denuncias por hechos de violencia enmarcados en la Ley 348, Ley Integral para Garantizar a las Mujeres una Vida Libre de Violencia, una cifra que evidencia esta problemática y que, además, muestra que el subregistro sigue siendo un obstáculo para conocer su magnitud real.
Según datos del Ministerio Público, del 1 de enero al 15 de diciembre de este año se atendieron 44.494 denuncias en Bolivia bajo la Ley 348, lo que representa un promedio de 127 casos por día. Los departamentos con mayor incidencia son los del Eje; Santa Cruz con 15.006 denuncias (33.7%), La Paz con 11.245 (25.3%) y Cochabamba con 7.235 (16.3%). Les siguen Tarija con 2.967 (6.7%), Potosí con 2.785 (6.3%), Chuquisaca con 2.054 (4.6%), Beni con 1.349 (3 %), Oruro con 1.290 (2.9%) y Pando con 554 (1.2%).
Tras evidenciar la concentración de casos en los departamentos, los datos muestran que el delito que concentra la mayor parte de las denuncias bajo la Ley 348 es la violencia familiar y/o doméstica, con 33.085 casos, lo que representa el 74.4% del total. Le siguen, en orden de frecuencia, abuso sexual (7.2%), violación (6.6%), violación de infante, niño, niña o adolescente (5.1%) y estupro (4%).
Otros delitos, aunque menos frecuentes, incluyen la substracción de un menor o incapaz (379), acoso sexual (332), violencia económica (150) y violencia patrimonial (54), así como diversos tipos de aborto como el común (144), aborto forzado (62), aborto culposo (10), aborto preterintencional (4), aborto seguido de lesión o muerte (2) y aborto honoris causa (1), rapto (60), actos sexuales abusivos (2), desaparición forzada de personas (2), lesiones graves y leves en razón de género (19), lesiones gravísimas en razón de género (1), práctica habitual del aborto (1) y sustracción de utilidades de actividades económicas familiares (2).
Los datos reflejan que la violencia familiar y doméstica concentra la mayor parte de las denuncias bajo la Ley 348, seguida por los delitos de violencia sexual. Según el boletín “25 N: violencias que persisten; derechos que urgen”, publicado en noviembre de este año por el Observatorio de Género de la Coordinadora de la Mujer, 9 de cada 10 víctimas son mujeres. Además, el documento señala que, tras la promulgación de la Ley 348, las denuncias por violencia familiar han oscilado alrededor de los 30.000 casos anuales.
El boletín presenta un cuadro histórico que detalla la evolución de los casos atendidos bajo esta tipología penal: en 2013 se registraron 13.314 casos; en 2014, 23.997; en 2015, 28.709; en 2016, 30.888; en 2017, 36.400; en 2018, 33.200; en 2019, 36.999; en 2020, 32.000; en 2021, 37.709; en 2022, 39.500; en 2023, 39.096; en 2024, 34.543; y hasta el 15 de diciembre de este año, la cifra asciende a 33.085. Estos números evidencian una tendencia persistente y elevada de denuncias por violencia familiar en el país.
DENUNCIAS EN 12 AÑOS
El boletín del Observatorio de Género de la Coordinadora de la Mujer indica que, desde la promulgación de la Ley 348 en 2013, Bolivia registró más de medio millón de denuncias por hechos de violencia contra las mujeres. La tendencia reciente confirma un aumento sostenido: desde 2022, el Ministerio Público recibe cada año más de 50 mil denuncias.
En los últimos cinco años, se denunciaron más de 130 hechos de violencia cada día, un indicador que evidencia la normalización social de las agresiones que amenazan la vida, la integridad y la seguridad de las mujeres. La concentración de denuncias en Santa Cruz, La Paz y Cochabamba refleja cómo los territorios con mayor población y movilidad enfrentan las presiones más fuertes sobre los sistemas de atención y justicia.
Estas cifras, sin embargo, muestran solo una parte de la realidad, pues el subregistro sigue siendo un obstáculo crítico para dimensionar la magnitud total de la violencia de género en el país. Según el boletín del Observatorio, que cita la Encuesta de Prevalencia de la Violencia 2016 realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el 71.5% de las bolivianas sufrió violencia de pareja, pero solo el 11.9% buscó ayuda y menos de la mitad formalizó la denuncia.
La violencia de género sigue siendo una de las principales preocupaciones en Bolivia, como lo demuestran las alarmantes cifras de denuncias registradas. A pesar de la implementación de la Ley 348, los datos indican que la problemática continúa afectando a miles de mujeres cada año.
