ONU-Hábitat y la NASA colaboran en el uso de datos de observación de la Tierra para el desarrollo urbano sostenible
Permite predecir la expansión urbana, los riesgos de inundaciones y de calor, la pérdida de biodiversidad, etc.
Washington, DC, 14 de octubre de 2024 — ONU-Hábitat y la NASA se reunieron este mes en Washington, DC, para discutir cómo ampliar y expandir la colaboración en curso en torno al uso de datos de observación de la Tierra para el análisis y la previsión de datos urbanos.
En 2019, ONU-Hábitat y la División de Ciencias de la Tierra de la NASA desarrollaron conjuntamente el kit de herramientas de observación de la Tierra, una herramienta que brinda soluciones prácticas para monitorear una variedad de indicadores de los Objetivos de Desarrollo Sostenible relacionados con las zonas urbanas, haciendo que los datos de observación de la Tierra sean accesibles para los planificadores urbanos y los tomadores de decisiones. Al combinar la experiencia de ONU-Hábitat con los datos de luces nocturnas y Landsat de la NASA, el kit de herramientas permite a las ciudades monitorear mejor la urbanización espacial, modelar el crecimiento de la población y tomar decisiones basadas en datos. El kit de herramientas también facilita la colaboración y el intercambio de conocimientos entre agencias espaciales, organizaciones internacionales y países en desarrollo para el desarrollo urbano sostenible.
La combinación de conjuntos de datos de observación de la Tierra con inteligencia artificial y algoritmos de aprendizaje profundo permite predecir la expansión urbana, los riesgos de inundaciones y de calor, la pérdida de biodiversidad, la escasez de viviendas y las deficiencias en los servicios públicos y la infraestructura en cualquier ciudad o zona. Al proporcionar a los responsables de la toma de decisiones urbanas acceso a la previsión y la planificación de escenarios, las ciudades pueden mejorar su capacidad para responder de manera eficaz, rápida, sostenible y equitativa a desafíos como la rápida expansión urbana, el acceso a una vivienda adecuada, la reducción de la pobreza, la vulnerabilidad de las comunidades en asentamientos informales, la resiliencia a los riesgos ambientales, la recuperación posterior a los desastres y los posibles impactos adversos de la urbanización en el medio ambiente.
La Directora Ejecutiva de ONU-Hábitat, Anacláudia Rossbach, reconoció el éxito de la colaboración y compartió la ambición de ONU-Hábitat de ampliar el uso del análisis de datos espaciales aprovechando tecnología de vanguardia e integrando las ciencias de la Tierra con datos socioeconómicos, como lo demuestra el Centro de Datos y Aplicaciones Socioeconómicas (SEDAC) de la NASA en la Universidad de Columbia.
A medida que se acelera la urbanización, junto con el cambio climático y otros desastres provocados por el hombre, comprender y predecir los patrones y tendencias del uso de la tierra es crucial para responder eficazmente a los riesgos y desarrollar resiliencia en las áreas y comunidades urbanas.
