Día de los Derechos Humanos
La ONU celebró el Día de los DD.HH. iniciando una campaña que se extenderá por todo el año 2016 para defender la libertad de expresión, la libertad de culto, la libertad a vivir libres de la miseria y la libertad a vivir sin miedo
La ONU celebró el Día de los DD.HH. iniciando una campaña que se extenderá por todo el año 2016 para defender la libertad de expresión, la libertad de culto, la libertad a vivir libres de la miseria y la libertad a vivir sin miedo, que sustentan la Carta Internacional de Derechos Humanos. El Día de los Derechos Humanos se celebra todos los años el 10 de diciembre conmemorando el día en que, en 1948, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Declaración Universal de los Derechos Humanos. En 1950, la Asamblea adoptó la resolución 423 (V), invitando a todo los Estados y organizaciones interesadas a que observen el 10 de diciembre de cada año como Día de los Derechos Humanos.
En esta ocasión el Día está dedicado al lanzamiento de una campaña de un año de duración para conmemorar 50 años de vigencia de los dos pactos internacionales de derechos humanos: el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales y el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, que fueron adoptados por la Asamblea General el 16 de diciembre 1966. La ONU explicó mediante un documento que los dos Pactos, junto con la Declaración Universal de los Derechos Humanos, constituyen la Carta Internacional de Derechos Humanos, que establece los derechos civiles, políticos, culturales, económicos y sociales que tiene todo ser humano al nacer.
La campaña "Nuestros Derechos. Nuestras libertades. Siempre" tiene como objetivo promover y dar a conocer los dos Pactos en su 50 aniversario. Los dos Pactos son jurídicamente vinculantes para los Estados que son parte, que en total alcanzan a 168 Estados. Cada uno de los Pactos es supervisado por un comité de expertos, que revisan el progreso. El comité también escucha demandas individuales y evalúa si los Estados deben remediar alguna situación.
Secretario General de las Naciones Unidas Ban Ki-moon emitió un mensaje exhortando a que "Ante las enormes atrocidades y abusos generalizados que se están cometiendo en todo el mundo, el Día de los Derechos Humanos debería impulsar una acción mundial más concertada para promover los principios atemporales que colectivamente hemos prometido cumplir. En un año en que se conmemora el 70º aniversario de las Naciones Unidas, podemos inspirarnos en la historia del movimiento de derechos humanos moderno, que surgió a raíz de la Segunda Guerra Mundial.
Secretario General de las Naciones Unidas Ban Ki-moon emitió un mensaje exhortando a que "Ante las enormes atrocidades y abusos generalizados que se están cometiendo en todo el mundo, el Día de los Derechos Humanos debería impulsar una acción mundial más concertada para promover los principios atemporales que colectivamente hemos prometido cumplir. En un año en que se conmemora el 70º aniversario de las Naciones Unidas, podemos inspirarnos en la historia del movimiento de derechos humanos moderno, que surgió a raíz de la Segunda Guerra Mundial.
Ban Ki-moon recordó que "Entonces, el Presidente de los Estados Unidos de América, Franklin D. Roosevelt, definió cuatro libertades básicas como derechos inalienables de todas las personas: la libertad de expresión, la libertad de culto, la libertad para vivir sin miseria y la libertad para vivir sin temor. En las Naciones Unidas, su esposa, Eleanor Roosevelt, unió sus fuerzas con paladines de los derechos humanos de todo el mundo para consagrar esas libertades en la Declaración Universal de Derechos Humanos. Los retos extraordinarios de hoy pueden considerarse —y afrontarse— a través del prisma de estas cuatro libertades".
Primera: la libertad de expresión. Esta libertad se niega a millones de personas y está cada vez más amenazada, por lo que debemos defender, preservar y ampliar las prácticas democráticas y el espacio de la sociedad civil. Ello es esencial para una estabilidad duradera.
Segunda: la libertad de culto. En todo el mundo, los terroristas se han apropiado de la religión y han traicionado su espíritu al asesinar en su nombre. Otros están atacando a las minorías religiosas y aprovechan los temores para obtener beneficios políticos. En respuesta a ello, debemos promover el respeto por la diversidad basado en la igualdad fundamental de todas las personas y el derecho a la libertad de religión.
Tercera: la libertad para vivir sin miseria. Gran parte de la humanidad sigue sin tener esta libertad. En septiembre, los dirigentes del mundo aprobaron la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible con el objetivo de poner fin a la pobreza y permitir que todas las personas puedan vivir con dignidad en un planeta pacífico y sano. Ahora debemos hacer todo lo posible para que esta visión se materialice.
Cuarta: la libertad para vivir sin temor. Los millones de refugiados y desplazados internos son un trágico resultado del incumplimiento de esta libertad. Desde la Segunda Guerra Mundial nunca tantas personas se habían visto obligadas a huir de sus hogares. Esas personas huyen de la guerra, la violencia y la injusticia a través de continentes y océanos, a menudo arriesgando sus vidas. En respuesta a ello, no debemos cerrar las puertas sino abrirlas y garantizar el derecho de todos a pedir asilo, sin discriminación alguna. Los migrantes que intentan escapar de la pobreza y la desesperanza también deben poder disfrutar de sus derechos humanos fundamentales. Hoy reafirmamos nuestro compromiso con la protección de los derechos humanos como base de nuestra labor. Este es el espíritu de la iniciativa de las Naciones Unidas. Los Derechos Humanos Primero, cuyo objetivo es impedir violaciones en gran escala y responder a las que se cometan. En ocasión del Día de los Derechos Humanos, volvamos a comprometernos a garantizar las libertades fundamentales y a proteger los derechos humanos de todos.