Un informe de la oficina de derechos humanos realizado en 70 países revela que la violencia contra ese sector persiste y llama a combatir la impunidad por esos crímenes.

09 de febrero, 2015 — Un informe de la oficina de derechos humanos realizado en 70 países revela que la violencia contra ese sector persiste y llama a combatir la impunidad por esos crímenes.

Los ataques a las escuelas ocurren con más frecuencia y las niñas son cada vez más el objetivo principal de esos atentados, alertó hoy en un informe la oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos.

La investigación detalla esos atropellos en 70 países durante un período de cinco años, entre 2009 y 2014, y subraya que la violencia contra las niñas y la educación persiste con creciente regularidad, además, indica que otras víctimas son los padres y profesores que abogan por la causa de la equidad en la educación.

Verónica Birga, experta de esa oficina, citó en una conferencia de prensa en Ginebra, varios ataques a gran escala, incluido el secuestro en abril de 2014 de unas 300 niñas en Nigeria por el grupo extremista Boko Haram.

“Básicamente el propósito de estos ataques es enviar un poderoso mensaje a la sociedad de que el lugar de las niñas no es en las escuelas, que ellas no deben ser educadas porque tienen otro rol en la sociedad”, dijo la especialista.

Agregó que la impunidad refuerza la creencia de que ese tipo de violencia es aceptable y lamentó que su efecto en cadena produzca temor en los padres que prefieren mantener a sus hijas en las casa para protegerlas.