El pasado viernes, el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas aprobó en Ginebra una resolución histórica a favor de los derechos de los homosexuales en el mundo. La convención insta a promover la igualdad de los individuos sin distinción de su orientación sexual. Amnistía Internacional denuncia que la homosexualidad sigue prohibida en 76 países del mundo globalizado.

La propuesta, de Sudáfrica, obtuvo 23 votos a favor, 19 en contra (en su mayoría países con gobiernos musulmanes) y 3 abstenciones. En la resolución se afirma que “todos los seres humanos nacen libres e iguales en lo que concierne su dignidad y sus derechos y que cada uno puede beneficiar del conjunto de derechos y libertades sin distinción alguna”. El texto del organismo multilateral pide a los países miembros adoptar legislaciones antidiscriminatorias y contra los ataques constantes hacia las personas con orientación o pertenencia sexual distinta a la del resto.