Los ministros de Exteriores de la OTAN instaron ayer a los talibanes a unirse a la mesa de negociación con el Gobierno de Afganistán para lograr una paz "inclusiva" en el país, de donde en cambio no vislumbra todavía la posibilidad de retirar a sus tropas, que actualmente apoyan a las fuerzas afganas.

"Recordamos a los talibanes que nunca lograrán sus ambiciones por medio del combate y enfatizamos que no hay solución militar al conflicto" en Afganistán, subrayaron los ministros en una declaración.

Los países reafirmaron su compromiso con la seguridad y estabilidad a largo plazo de Afganistán, así como con un proceso de paz que esté liderado por los propios afganos.

"Seguimos comprometidos con el apoyo a Afganistán. Esto es obviamente bueno para el pueblo afgano. Pero también por nuestro interés. Porque un Afganistán seguro y estable nos hace a todos más seguros", indicó al término del encuentro el secretario general aliado, Jens Stoltenberg.